Esther Paulino es madre de tres chicos, maquilladora profesional y es de Haina, San Cristóbal ¿Cuál es su historia?: Sobrevivió al cáncer de mama.
Hace tres años dio a luz, notó una deformidad en uno de sus senos, cuando pregunto a una de las enfermeras que la atendían, le dijo que podría ser por el cumulo de leche materna pero a medida que pasaban los días, decidió ir a un ginecólogo donde le realizaron una sonomamografia y noto anomalías por lo que fue referida a un oncólogo.
Días después de acudir donde el especialista recibió la noticia de que padecía cáncer de mama y que era necesario tratarlo lo antes posible.
"En ese momento senti un nudo en mi garganta y un miedo terrible a morir y dejar a mis niños. Tenía un pequeño negocio uñas acrílicas y me informaron que debía dejarlo ya que posiblemente el monómero era lo que me había ocasionado el cáncer", relata.
Luego de recibir la noticia, comenzó la verdadera batalla, sin empleo y enferma. Esther se había quedado sin cabello, su piel había cambiado y bajaba rápidamente de peso.
Puedes leer: Perla Boció: “Me gusta ayudar a los demás a que se acepten»
“Recuerdo estar en cama y escuchar a mi niño preguntarme porque estaba fea y delgada y yo simplemente no sabía que responder. En medio de mi desesperación por mejorar mi apariencia física durante el proceso, comencé a mirar tutoriales de maquillaje en YouTube para aprender a maquillarme y así fue como empecé".
Luego de terminar su tratamiento y con unos deseos enormes de salir adelante comenzó a maquillar a sus amigas a bajo costo y guardaba ese dinero para poder costear un curso de maquillaje profesional.
"Logré hacer mi curso de maquillaje pero el reto era poner mi propio estudio de maquillaje con unas cuentas de banco en cero. Así que decidí arriesgarme e ir a buscar trabajo como maquilladora y conseguí el empleo, ahí laboré por un año hasta reunir dinero para lanzarme y poner mi propio negocio".
Luego de todo esto, Esther Paulino se convirtió en maquilladora certificada de efectos especiales acreditada por EDOCINE y logró establecer su propio negocio.
Se define como una mujer fuerte y emprendedora y entendió que su enfermedad solo fue el medio que Dios uso para que entendiera lo fuerte que era.
